
Cuando hay problemas de plagas en casa, lo primero que intentamos es ponerles remedio nosotros mismos. Usar métodos caseros no siempre da el resultado que esperamos. Por eso existen las empresas de control de plagas o el fumigador de cucarachas. Actualmente ya no se le llama así al técnico que realiza los tratamientos de control de plagas.
Antiguamente el método más eficaz para eliminar las cucarachas y otras plagas de insectos, era la fumigación. Hoy en día existen métodos más avanzados para aplicar los insecticidas. Pero comúnmente se le sigue llamando fumigador al técnico que aplica los productos contra las plagas. Además, el técnico en control de plagas ya no solo fumiga, sino que aplica diversos tratamientos. Fumigar consiste en aplicar un insecticida en forma de pulverización. Pero existen diversos insecticidas que se aplican en otros formatos, como el gel o la laca.
Los productos se han ido adaptando a las nuevas necesidades, pero también han ido perdiendo su eficacia. Esto se debe, sobre todo, a la necesidad de buscar soluciones que afecten lo menos posible al medio ambiente. Eso significa usar menos biocidas y de menor impacto. Esto se traduce en mayor dificultad para erradicar una plaga. Antes también los llamaban «exterminadores» ahora ya no tiene mucho sentido. Es prácticamente imposible exterminar una plaga. Pero sí puede controlarse con un mantenimiento de control de plagas combinado con buena limpieza y orden.
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