Una de las instalaciones con mayor riesgo de proliferación de legionella son los acumuladores de agua caliente sanitaria. Estas instalaciones, como su propio nombre indica, acumulan agua caliente para su uso posterior. Si no tienen un mantenimiento adecuado, la bacteria de la legionelosis encontrará un lugar excelente para reproducirse. Por este motivo, es fundamental realizar una limpieza de acumuladores de agua al menos, una vez al año.
Tal vez tu negocio haga uso de este tipo de instalaciones para abastecer de agua caliente a los clientes. Si es así, debes prestar especial atención al mantenimiento y limpieza de los acumuladores antes de que te sorprenda el inspector de sanidad.
Los acumuladores de agua caliente sanitaria cumplen una función muy importante, sobre todo en negocios como hoteles. Contar con acumuladores permite que siempre haya disponible agua caliente. Además de garantizar que la temperatura del agua no se vea afectada si se abren varias llaves al mismo tiempo. Pero esta gran cantidad de agua caliente es caldo de cultivo para la bacteria que provoca la legionelosis. Si además la instalación acumula suciedad y lodos, los tratamientos mediante choque térmico no funcionarán. Puesto que los residuos suponen un refugio para la bacteria y no le afectarán las elevadas temperaturas. Por este motivo es muy importante que se realice una limpieza periódica de los acumuladores. A fin de evitar que se acumule demasiada suciedad en la instalación que favorezca la proliferación de legionella.
Si tienes uno o varios acumuladores de agua caliente sanitaria y necesitas realizar un tratamiento para el control de legionella, infórmate sin compromiso.
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