La legionelosis es una enfermedad infecciosa que se contagia a través de aerosoles. El control de legionella existe para prevenir que se produzca una epidemia de legionelosis. Para que se produzca el contagio deben darse una serie de factores:
Si estas al cargo de una instalación de riesgo de infección por legionella, debes contar con un plan de prevención y control. Para ello es imprescindible contar con personal cualificado, ya sea dentro de tu propio negocio o subcontratando a una empresa especializada en el control de legionella. Existe una normativa que regula este tipo de trabajos y que indica que hacer en caso de detectar la presencia de la bacteria. Si necesitas asesoramiento y presupuesto sin compromiso, no dudes en ponerte en contacto con Ambiplaga. Puedes llamarnos al 952 26 25 42 o enviarnos un mensaje de WhatsApp.
Recuerda que es obligatorio cumplir la normativa vigente en materia de legionelosis. Pueden hacer una inspección de tus instalaciones en cualquier momento y deberás tener toda la documentación en regla para evitar sanciones. Se da mucha importancia a este tema porque un brote de legionelosis puede causar graves problemas en la salud pública. Esto es así porque las instalaciones con mayor riego suelen encontrarse en zonas públicas o con mucho tránsito de personas, como parques, hospitales o gimnasios.